La salud materna puede verse como un indicador del nivel de desarrollo de una nación y, así mismo, la mortalidad materna es reflejo de desigualdades y desventajas económicas, sociales y educativas.

Cada día, a nivel mundial, se registran alrededor de 840 muertes de mujeres por diversas causas relacionadas al embarazo, parto y postparto que podrían haberse evitado, es decir, al año mueren cerca de 303.000 mujeres por dichas complicaciones, señala ONU Mujeres.

Las cifras son extremadamente altas, es por eso que la Agenda 2030 de Objetivos Desarrollo Sostenible (ODS), incluye metas como reducir la tasa mundial de mortalidad materna a menos de 70 por cada 100.000 nacidos vivos.

¿Cómo está la situación de la salud materna en Colombia?

En Colombia, la mayor cantidad de muertes maternas se presentan en los departamentos periféricos como La Guajira, Amazonía, Chocó, Nariño, Caquetá y Cauca, territorios en los que habitan los grupos étnicos más numerosos y donde se registran mayores índices de pobreza, señala un informe de 2021 del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE). El documento indica que las mujeres indígenas o pertenecientes a alguna etnia tienen mayor riesgo de morir por complicaciones maternas, debido a la falta de acceso a servicios básicos y la atención deficiente en salud, al igual que aquellas mujeres con niveles educativos más bajos y cuyo estatus de afiliación al sistema de salud es de régimen subsidiado.

Aunque el Ministerio de Salud, en conjunto con el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), ha creado valiosas estrategias, diagramas y protocolos para la vigilancia de la salud materna, la reducción de muertes asociadas a la maternidad aún es baja y la disminución en las cifras es lenta. Además, la pandemia producida por el virus del COVID-19 disminuyó la atención prenatal en establecimientos médicos, lo cual se tradujo en un aumento de muertes maternas entre 2019 y 2020, destaca el DANE. Dicho aumento de mortalidad materna significa un retroceso para Colombia, pues el país busca contribuir al alcance de las metas de desarrollo sostenible a nivel mundial.

Causas de las muertes maternas en el mundo

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), las causas directas más frecuentes de defunción materna son: la pérdida excesiva de sangre, infecciones, tensión arterial alta, abortos riesgosos, y la obstrucción del parto. Entre las causas indirectas asociadas a muertes maternas se encuentran enfermedades como la anemia, el paludismo, afecciones cardiovasculares y el VIH. La mayoría de estas razones son prevenibles y tratables por personal médico capacitado, sin embargo, una gran cantidad de mujeres no cuenta con acceso a atención prenatal y postnatal adecuadas.

Visibilizar la salud materna es de suma importancia, pues es una expresión de la desigualdad que existe en el mundo a nivel educativo, económico y social. La mayoría de las muertes maternas prevenibles se presentan en mujeres que viven en países en desarrollo, áreas rurales y comunidades empobrecidas, por lo tanto, visibilizar y respaldar la salud materna es abogar por la defensa de los derechos humanos.

Si son causas prevenibles, ¿qué se puede hacer para reducir las cifras?

El panorama presentado anteriormente es una invitación para que las naciones trabajen por reducir las cifras de muertes maternas y velar por la salud de las mujeres en estado de embarazo y postparto, pues no se han invertido los recursos necesarios para atender adecuadamente las necesidades de esta población.

Para la OMS es importante duplicar los esfuerzos que permitan a todas las mujeres acceder a sistemas de salud adecuados, para que puedan gozar de servicios de salud materna respetuosos y de calidad. La organización recalca la importancia de que todas las mujeres en periodo de gestación sean atendidas por profesionales capaces de prevenir complicaciones durante el embarazo, parto y posparto; la atención a tiempo, la prevención y el tratamiento adecuado “pueden suponer para la mujer y el niño la diferencia entre la vida y la muerte”, señala la organización.

La OMS también hace énfasis en la prevención de embarazos imprevistos, especialmente en mujeres adolescentes, quienes enfrentan un mayor riesgo de muerte materna, es por ello que una mejor educación sexual y reproductiva, así como el acceso a métodos anticonceptivos para todas las mujeres son indispensables para reducir las cifras de mortalidad como resultado del embarazo.

9 pasos para reducir la mortalidad materna

El Fondo de Población de las Naciones Unidas propone nueve pasos estratégicos encaminados a desarrollar planes que contribuyan a cerrar brechas de desigualdad, fortalecer los recursos económicos para mejorar el acceso a la salud materna, promover la participación ciudadana en la exigencia de derechos y reforzar la atención a las necesidades de salud sexual y derechos reproductivos:

• Desarrollar políticas públicas que aborden de manera contundente las grandes brechas en la equidad, para así lograr el acceso y la cobertura universales en salud materna y salud sexual y reproductiva.
• Destinar los recursos necesarios para la ejecución de políticas públicas relacionadas con el acceso y la cobertura universales en salud materna y salud sexual y reproductiva.
• Usar la evidencia en el desarrollo de políticas y programas para la reducción de la morbimortalidad materna y difundir el conocimiento generado a partir de la implementación de las políticas públicas para la reducción de la morbimortalidad materna mediante la cooperación transversal sur-sur entre los países de la región.
• Fortalecer los mecanismos de participación ciudadana y rendición de cuentas, en tanto elementos clave de un enfoque basado en derechos con una ciudadanía activa y empoderada para la promoción de la equidad en salud y la reducción de las barreras existentes.
• Mejorar la calidad de la atención en salud materna y salud sexual y reproductiva con base en estándares, en tanto elemento esencial para reducir la mortalidad materna y para garantizar el ejercicio del derecho a la salud a todas las mujeres, sea cual sea su condición social, incluyendo la promoción de una respuesta integral al aborto inseguro.
• Invertir en el personal de salud para mejorar sus condiciones de trabajo y fomentar así su compromiso con la calidad de los servicios y el avance hacia el acceso y la cobertura universales en salud, sobre todo en la atención primaria, particularmente involucrando a las parteras profesionales. Un mayor acceso a parteras profesionales competentes y reguladas podría salvar millones de vidas cada año.
• Identificar las barreras que enfrentan las personas para acceder a los servicios de salud materna a los que tienen derecho, y las poblaciones que se ven más afectadas por estos obstáculos.
• Mejorar el acceso universal a los métodos anticonceptivos.
• Atender las necesidades de salud sexual y reproductiva de las poblaciones adolescentes reconociendo sus derechos y su impacto en el desarrollo de los países.