Publicado el 10 de febrero de 2025
Cada 11 de febrero se conmemora el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, una fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2015 para reconocer el papel de las mujeres en la ciencia y la tecnología.
Actualmente la brecha de género en los campos STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) persiste debido a barreras estructurales y culturales que limitan el acceso y desarrollo de las mujeres en estos campos. Según el informe Women in Science 2023 del Instituto de Estadística de la UNESCO, solo el 33% de los investigadores en el mundo son mujeres y en áreas como la ingeniería y la inteligencia artificial esta cifra es aún menor. Un informe del World Economic Forum (2023) señala que solo el 29% de los empleos en inteligencia artificial y el 27% en ingeniería corresponden a mujeres, evidenciando una brecha de más del 70%.
Adicionalmente, las mujeres que logran ingresar y desarrollarse en STEM suelen enfrentarse a condiciones laborales desiguales, menores oportunidades de ascenso y menor reconocimiento por sus contribuciones científicas, perpetuando la brecha.
En el marco de este día resulta crucial recalcar que aumentar la participación de mujeres en STEM es necesario para avanzar en la igualdad de género y lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible 5 (ODS 5) de la Agenda 2030, que busca garantizar la igualdad de oportunidades para todas las personas. La equidad en STEM no solo fortalece la diversidad en la investigación y la innovación, sino que también impulsa el crecimiento económico.
Por ello, aumentar la representación de mujeres en STEM en los medios de comunicación que consumimos a diario resulta fundamental para impulsar su participación, pues estos desempeñan un papel clave en la construcción de imaginarios sociales y profesionales, y la manera en que se presenta a las mujeres en ciencia y tecnología influye en las aspiraciones de las niñas y jóvenes. La falta de representación mediática y los estereotipos de género refuerzan la percepción de que estos espacios no son para ellas, mientras que la visibilización en la pantalla puede ampliar los horizontes profesionales y reducir la brecha de género en STEM.
Según la UNESCO, existen diversos factores interconectados que pueden determinar que una niña o joven se incline hacia una carrera STEM (o no lo haga), tales como el nivel individual, la familia, la escuela y lo social. Los medios de comunicación encajan dentro del factor social. “Los estereotipos de género retratados en los medios son internalizados por los niños, las niñas y los adultos y afectan la forma en que ellos se ven a sí mismos y a los demás. Los medios pueden perpetuar o desafiar los estereotipos de género acerca de las capacidades y carreras en STEM”, añade la UNESCO. Por ello, la prensa, los anuncios, las redes sociales y los productos audiovisuales como series y películas pueden inspirar a las generaciones de niñas y jóvenes a ser mujeres en STEM.
De acuerdo con el estudio del Instituto Geena Davis, ‘Un análisis de 15 años de mujeres en las disciplinas STEM en la pantalla, 2007-2022′ el 38% de los personajes en roles STEM en cine y televisión entre 2018 y 2022 fueron mujeres, lo que representa un avance mínimo en comparación con la década anterior (37%). Adicionalmente, las mujeres en STEM en los medios han sido históricamente representadas en su mayoría en el ámbito de las ciencias médicas o biológicas, dejando de lado otras áreas como la ingeniería y la computación. Sin embargo, entre 2018 y 2022, hubo un ligero aumento en la representación de mujeres ingenieras y programadoras en la pantalla, pasando del 2% al 13% y del 7% al 15%, respectivamente. No obstante, a pesar de este leve aumento, la narrativa predominante aún refuerza estereotipos que limitan la percepción de la ciencia como un espacio masculino.
Asimismo, en muchas ocasiones los medios presentan a mujeres en estos ámbitos solo en contextos de excepcionalidad o en situaciones de lucha contra la adversidad, reforzando la idea de que su presencia en estos espacios es poco común y difícil de alcanzar, limitando el acceso y la permanencia de las mujeres en la ciencia.
Los medios de comunicación son una barrera cuando perpetúan estereotipos de género, pero también se presentan como una oportunidad para promover la participación de las niñas y mujeres en los campos STEM.
Para desafiar los imaginarios de género, construir una representación más equitativa e influir en las aspiraciones de las nuevas generaciones, los medios deben asumir un rol activo en la transformación de las narrativas. Tanto la UNESCO como el Instituto Geena Davis coinciden en que los cambios en la representación de mujeres STEM en los medios pueden generar efectos positivos en la equidad de género. Algunas de las estrategias clave incluyen:
Como lo hemos mencionado, los medios también pueden ser herramientas poderosas para el cambio. Desde Share-Net Colombia les compartimos estos ejemplos destacados que permiten soñar y representar equitativamente a las niñas, jóvenes y mujeres:
Mejorar la representación de mujeres en STEM desde los productos y medios que consumimos a diario amplía las oportunidades de referencia para niñas y jóvenes y su interés en estas disciplinas. La construcción de narrativas diversas y realistas es un paso clave en la esfera social para generar cambios en la percepción de STEM y fomentar la participación de las niñas y mujeres en estos ámbitos.
Desde Share-Net Colombia, invitamos a reflexionar sobre el impacto de la representación mediática y a actuar en la construcción de una sociedad donde las niñas y mujeres puedan alcanzar su pleno potencial sin barreras ni discriminación.